El marido llama a la casa y le dice a su señora, cariño me acaba de salir una oportunidad única para irme de pesca por una semana, pero me tengo que ir ya. Por favor, prepárame el equipaje con las cosas de pescar, ropa y no se te olvide el pijama azul de seda.
Una hora más tarde pasa por su casa y su señora le tenía todo listo. Se despide y se va.
A la semana regresa y la señora le pregunta:
Cómo te ha ido?
Bárbaro, le contesta él. Lo único que te olvidaste fue del pijama.
A lo que la mujer con una sonrisa le responde:
No, no me olvidé. Lo puse en la caja de los anzuelo
Está Eva en el paraiso y le entran ganas de echar un casquete. Ve un dinosaurio y le persigue, pero éste se escapa hasta que se cae por un barranco.
Más tarde ve un mono, también le persigue hasta que consigue agarrarle por los pelos del culo y se los arranca.
Eva decide meterse en un río cercano, entonces ve un pez y decide calmarse con él.
Conclusión: sabemos como se extinguieron los dinosaurios, por qué los monos no tienen pelos en el culo, pero lo que nunca llegaremos a saber es a que olían antes los peces.
Un tío lleva tres horas pescando sin ningún resultado,
en esto que viene el cartero del pueblo, mete la mano
en el agua y empieza a sacar truchas una tras otra.
-¡Pero bueno! ¿Como puede hacer eso?
-No, yo es que las pesco con la mano.
-Pero eso tendrá truco, ¿no?
-Bueno, como usted me ha caído bien le diré el truco.
Lo único que tiene que hacer usted es meterle la mano
ahí mismo a su mujer y después venir a pescar. Al meter
la mano en el agua los peces se sienten atraidos y los
puede coger con la mano.
-Gracias, gracias.
A la mañana siguiente se acerca a su mujer y le mete la mano
Ella exclama-¡Te vas de pesca hoy?!