El otro día, dando mi habitual carrera diaria por la playa, observé como en la arena seca, donde la pleamar no había llegado, un leve movimiento. Me paré a ver que era y comprobé que eran dos cangrejos atados con nylón y que habían sido usados previamente por un mal llamado pescador, como cebo. Estaban empaquetados con el hilo formando un tandem y abandonados al sol. El pecador ya no estaba, había levantado las cañas. El animal, uno de ellos ya que el otro estaba muerto, agonizaba secándose poco a poco. Me llevó un rato quitarle el entramado de hilo que tenía procurando no hacerle daño ni arrancarle ninguna de las patas o pinzas. Ya sé que es solo un cangrejo y que los usamos como cebo y los sacrificamos para este menester, pero si nos vamos y está vivo, no ganamos nada con esta inútil y agónica muerte. Creo que el cangrejo pudo sobrevivir ya que esperé un poco a ver si las olas lo devolvían y no ocurrió así por lo que imagino que pudo enterrarse en la arena. En fin, pongo esto aquí porque me indigna bastante, esto y la gran cantidad de cajas de cebo vacías que me encuentro tiradas a lo largo de la playa. Saludos a todos menos a los que se dan a tales prácticas.