os voi a poner una cronica del partido de ayer la de la real que no tiene desperdicio, lo he sacado del mundo deportivo:
Pino despierta a la bestia
Eskerrik asko, Pino Zamorano. Eres un maestro. El peor árbitro que han conocido las canchas profesionales en España desde Japón Sevilla, pero un mago del silbato, el orgullo del gremio. No sólo te has hecho acreedor a retornar a Primera de la mano de la Real, te mereces la final de la Champions League, un piso en Torrevieja, un busto en Las Rozas, la vida eterna. Gracias, 'Pinotxo', porque convertiste una victoria más de la Real, el 1-0 clásico de la presente temporada, el habitual trámite triunfal en Anoeta, en un ejercicio de épica memorable; porque permitiste la metamorfosis de un estadio ilusionado pero temeroso en un hervidero de pasiones, en una sartén de aceite hirviendo; habilitaste la perfecta comunión de 20.000 aficionados con los 11 vestidos de azul y blanco; y despertaste a la bestia.
Esa Real que ya había cedido la pelota y que estaba totalmente consagrada a dejar a pasar el tiempo fue entonces una pantera con los ojos inyectados en sangre, deseosa de aniquilar a su pieza. Mila esker, señor trencilla, porque de tu inutilidad, de tu insondable incapacidad, de tu infinita torpeza, de tu rara habilidad para irritar pitando siempre lo que no es, surgieron una de las victorias más hermosas de la temporada, en un estadio volcado y ya entregado al ascenso, y uno de los pasos más sólidos hacia Primera. Larga vida a Pino Zamorano.
El 'soplapitos' madrileño quiso culminar su obra de erosión a la Real de todo el partido con una jugada maestra de las suyas. Faltaban 14 minutos para el final de un encuentro que los de Lasarte iban a ganar porque, si bien ya habían entregado la pelota, estaban sumamente cómodos en defensa por la inocencia y poca chispa ofensiva de su pobre oponente. Pero Pino no podía consentir que su actuación no quedara más nítidamente reflejada. Y señaló un penalti ya considerado 'zamorano'. A la salida de un córner, Rivas encimaba a Xisco Nadal, que, de forma vergonzosamente histriónica, dejó caer su pesadísima humanidad al verde. Sabía que con este colegiado algo podía pasar, que el olor a Pino desencadena las mayores atrocidades. Y no se equivocó. Penalti y a callar. Cómo sería esa pena máxima que el propio colegiado no se atrevió a echar a Rivas, el presunto infractor, cuando la acción fue dentro del área pequeña y el manchego ya tenía una amarilla. Y para poner colofón a su gloriosa hazaña, dio por válido el gol de Juanlu, el que remachó a la red tras la parada de Bravo al lanzamiento de Samuel, cuando el goleador había entrado claramente en el área antes de tiempo. Qué infamia. Qué bendición.
A partir de ahí, todo lo que pasó fue favorable para la Real. Taladrado por su conciencia, el árbitro no tardó ni tres minutos en echar a Ballesteros y dejar al Levante con diez. Expulsión 'zamorana', rigurosa la primera amarilla y la segunda, por ¿protestar? Tan malo como altivo. Tuvo media docena de oportunidades de sacar con más justicia amarillas a los valencianos, pero no dudó a la hora de echar a un tío por discutir una decisión suya. Los tres minutos que tardó el enorme central en abandonar el terreno de juego terminaron de llenar de rabia el ánimo de los locales.
La inspiración de Zuru y Xabi
Ya sólo faltaba medio segundo de inspiración para que llegara la ocasión de poner justicia en el marcador. Y ése lo tuvo David Zurutuza. El de Iparralde, desafortunado hasta ese momento, trazó un lujo de pase vertical al hueco a Xabi Prieto, que apuró hasta línea de fondo, antes de sacar la varita y repartir fantasía. El beneficiario de su centro fue Ansotegi. Si había que resolver con las entrañas, ahí estaba él. El central vio la autopista hacia el área y la opción de convertirse en el héroe del encuentro, en 'Ironmansotegi'. Cerró los puños, se pegó dos juramentos y entró al balón de Prieto como un poseso. Conectó su privilegiada cabeza al cuero, colocándolo en el primer palo, lejos del alcance del portero. Anoeta estalló de delirio, liberó feromonas y toda la rabia que le había ido inoculando en el ánimo Pino Zamorano. Zurutuza, sangre de horchata, puso la rúbrica con el 3-1 e hizo estallar la 'mascletá' txuri urdin. Así da gusto celebrar un triunfo. Eskerrik asko.
La Real iba camino de firmar un triunfo más, el undécimo en casa, trabajado, con altibajos, pero victoria. Su primera parte fue sensacional, dominada de cabo a rabo, con una pareja de pivotes que, esta vez sí, se estaba almorzando al rival y un Griezmann entonado y venenoso en el día de su 19º cumpleaños. Esa superioridad aplastante la rubricó Bueno, rematando con la cabeza a la red un centro con rosca extraordinario de Prieto, 'Xabi Potter' ayer con sus tres asistencias. En la reanudación, la Real pudo sentenciar con un cabezazo de Bueno y, sobre todo, un disparo de Aranburu que repelió Ballesteros tras pase de la muerte de Griezmann. Poco a poco, los realistas fueron cediendo terreno y pertrechándose, hasta que Pino reclamó su cuota de protagonismo. Eres inmenso, don Alfonso.
Estalló la primavera en Anoeta. La victoria de ayer, con esa reacción rabiosa, consolida a la Real en el liderato, fulmina a un rival directo, deja al cuarto a diez a expensas de lo que pueda hacer el Betis hoy y demuestra que este líder puede con todo. Gracias, 'Zamorako Pinua'. Gracias, Real