El mundo salvaje y mucho mas en el mundo marino, la vida, se sujeta con un débil hilo y querer valorar el dolor y la muerte desde una perspectiva humana, no tiene sentido. Mi filosofía es nunca matar nada que no tenga una verdadera utilidad. Pero si el animal es verdaderamente aprovechable, me acompañará a la casa y su muerte habrá tenido sentido desde mi punto de vista. En el mes de Septiembre se reunen los voladores cerca de la isla de Tarifa y cuando regresamos de la guerra hacia el puerto ya de noche y observamos el ataque inmisericorde de las chovas haciendo hervir el agua, si tenemos tiempo gustamos de echar unos cañazos, normalmente nos quedamos con una, porque son realmente grandes y es una carne que empalaga mucho, acto seguido cambiamos los señuelos por otros sin anzuelos, solo para sentir los porrazos que producen los ataques de esas bestias, solo un ratito de divertimento y para casa. Ningún sentido tendría llenar la bañera de pescado y sangre, de los que tenemos un interés mínimo. Yo que he vivido toda mi vida relacionándome con la mar y he visto de todo, lo que concluyo en que entre los peces, el dolor, el miedo, la muerte, no deberíamos valorarlo desde el punto de vista humano. El mar es otra cosa.
Pero evidentemente, cada uno es libre de congratular a su conciencia.
Seré yo un psicópata, asesino, inconsciente y nunca me lo he planteado????. El pescao está muy bueno y a mi gente les flipa, frito, asado, en caldereta, al horno, en papillot, empanado (filetes de chova), hervido en blanco, etc, etc.