Desde tiempos remotos la superstición y el mar han estado estrechamente vinculados, hay quién cree más en ellos y quién no le presta ninguna atención, con los siglos se han creado y respetado muchas de esas supersticiones, respentàndolas hasta el último suspiro hoy abordaré algunas de ellas, conocidas, sorprendentes, curiosas y ocultas, vamos a ello.
La prohibición de silbar.
Esta es una superstición que se remonta a siglos pasados, actualmente los transatlánticos modernos desvelan en sus diarios que durante los años 50 se respetó esta norma no escrita.
se suponía que el silbar atraía la formación de vientos poderosos, solo se podía silvar mientra hubiese clama chica o espesa niebla.
Durante años los marineros fueron condenados por romper este tabú.
Viajar con bolsas o maletas negras.
El negro es el color de la muerte y en el mar recuerda a los oscuros fondos marinos, por lo que el negro no es bienvenido a bordo.
Hablar con un pelirojo antes de embarcar
Evitar encontrarse con persona con el pelo de color rojo. Según las historias marineras, hablar con un/a pelirrojo/a antes de embarcar, trae mala suerte
Dejar sin contestar un deseo de buena suerte.
Si alguien te lo desea antes de partir, siempre debes contestar.
Evitar encontrarse con un "pies planos".
Al igual que los pelirrojos, evitaremos la mala suerte hablando nosotros primero
Una pieza de madera "robada" incrustada en la quilla
hará que nuestro barco navegue más rápido y mejor
Una moneda de plata bajo el mástil mayor
asegurará una buena travesía. ( En la actualidad esta superstición aún se conserva )
Siempre embarcar y desembarcar con el pié derecho.
Lo contrario no es buen presagio
Verter vino en cubierta.
Será signo de buena nueva antes de un gran viaje
Tirar piedras al Mar causará grandes tormentas.
Es considerado un signo de falta de respeto hacia los Oceános
Las flores traen mala suerte a bordo.
Se considera que podrás ser usadas para las coronas funerarias y por lo tanto no son bien recibidas
Mirar hacia atrás una vez dejado puerto.
Si no estás convencido de que podrás enfrentarte a los bravos mares y completar tu viaje, no debes partir
Un perro visto junto a aparejos de pesca.
No es signo de nada bueno
Al contrario que en tierra, los gatos negros son un buen augurio en la mar y garantía de vuelta a casa a salvo
Avistar golondrinas.
En el Mar es signo de que tierra está cerca y son consideradas buena señal
Delfines nadando junto al barco.
Son considerados un gran amigo del hombre de mar y su presencia indica protección
Trae mala suerte matar un Albatros o a una Gaviota.
Se cree que reciben el alma de los marineros muertos y son considerados como un presagio de mala suerte en el mar, especialmente si los matas.
Nunca entregar una bandera a través de los peldaños de una escalera
Otras supersticiones son como la del momento de botar el barco o ponerle un nombre al mismo, en el caso de que cuando se bota el barco no se rompa la botella será signo de malos presagios y en cuanto al nombre de la embarcación, todos los barcos legalmente han de tener un nombre, si no lo tienen la superstición nos dice que es de mal agüero y ello nos traerá malos momentos, toda esta superstición no acaba aquí, la historia os dice que al adquirir un barco de segunda mano si tenemos la idea de cambiarle el nombre ello nos traerá el riesgo de la mala suerte, todos los navegantes lo saben, como sepan tal vez que también existe un exorcismo para desprender esa " mala suerte " y poderle cambiar el nombre a la embarcación y salir a mar tranquilamente, les explicaré ese exorcismo encontrado en Internet, es el siguiente :
Realizar una maniobra curiosa y un tanto ridícula: En mar abierto, daremos avante a toda máquina, después viraremos 180º (media vuelta) y cruzaremos nuestra propia estela (agua que deja el casco del barco, marcada por su paso) tres veces alternando de bandas al pasar sobre ella (babor, estribor, babor... o estribor, babor, estribor...). Una vez hecho todo esto, ya podemos hacernos a la mar tranquilamente.
Para finalizar una historia...
Dice la historia que un lejano día, en Inglaterra, hace demasiados años, decidieron demostrar que el viernes no era día de malos augürios.
Empezaron a construir un barco que se llamase Viernes, fue botado en un día viernes.
Y a la misma coincidencia, el barco zarpo hizo su viaje inaugural un viernes, al mando de un capitán de nombre Viernes.
El barco y toda su tripulación horas depues desaparecieron en las oscuridades del mar y nunca mas se supieron noticias de ellos.
Analizando unos cien grandes accidentes de aviación, registrados desde 1937, se demuestra que solo catorce de ellos sucedieron un día viernes y ninguno de ellos un día trece de ningún mes.
Fuentes :
2 Comentarios
Recommended Comments